TALLER LITERARIO CON ANTONIO TEJEDOR

TALLER LITERARIO CON ANTONIO TEJEDOR

Hoy 2 de abril los alumnos de 3º B  y C han realizado un taller literario sobre el cuento con Antonio Tejedor, un ex profesor del centro que tiene ya publicados varios relatos y novelas (Los lagartos de la quebrada, Sentados en el borde de una nube... , )  y que en la actualidad disfruta de una merecida jubilación,  dedicando parte de su tiempo a la lectura y a la escritura creativa (recogida en su blog: lagartosquebrada.blogspot.com), además de colaborar estrechamente con el centro siempre que puede.

 Para realizar esta actividad, los alumnos habían leído previamente  4 relatos suyos (Dos entradas, el semáforo, Zaragoza y la elección) y habían inventado finales para cada uno de ellos.  Antonio, a lo largo de los 50 minutos, además de escuchar atentamente los finales de algunos alumnos, ha leído los originales pensados por él y les ha dado algunas claves para crear un cuento: partir de una idea inicial o un final y a partir de ahí  ir creando la historia con pocos personajes (2 ó 3), con las justas acciones (no excederse), alternándolas con fragmentos que inciten a la reflexión, no detenerse excesivamente en descripciones prolijas, sino “ir al grano”, elegir historias cotidianas, frases sencillas. Les ha explicado en la pizarra la teoría del Iceberg de Hemingway que consiste en que el escritor ha de concebir su obra conociendo mucho más de la historia de lo que finalmente cuenta en lo que escribe, es decir que el escritor conoce la totalidad del Iceberg, pero lo que sobresale del agua es solo una pequeña porción de este, en la que deben vislumbrarse ya, mediante pequeñas pistas, las dos historias del cuento.  En la parte oculta debería estar un final sorprendente (que dé un giro a la historia).



Finalmente Antonio les ha puesto “deberes” a estos alumnos para las próximas vacaciones de Semana Santa: les ha propuesto el reto de crear una historia con ingredientes de misterio, partiendo de una situación inicial en la que una chica llama a otra por teléfono para que acuda a su casa.  A partir de ahí, ¡la imaginación al poder!   Sin duda ha sido una actividad interesante, amena y estimulante para los alumnos de 3º,  pues ha despertado en ellos al escritor que llevan dentro.  


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